Cuando las venas de la pelvis no funcionan correctamente, los pacientes pueden desarrollar síntomas que incluyen menstruación dolorosa, presión y pesadez en la pelvis, presión en la vejiga al estar de pie durante largos períodos y dolor pélvico después de las relaciones sexuales. Todos estos síntomas son causados por “venas varicosas” en la zona pélvica. Las mujeres con enfermedad de las venas pélvicas también pueden tener venas varicosas púbicas o labiales; los hombres pueden tener varicoceles.
Diagnóstico de la enfermedad de las venas pélvicas
Estas venas se pueden ver con una ecografía, pero para comprender la extensión de la enfermedad se utiliza un venograma y una ecografía intravascular. Este procedimiento requiere una punción con aguja en la parte superior del muslo y dura entre 30 y 40 minutos. Los pacientes pueden volver a sus actividades normales al día siguiente.
Tratamiento de la enfermedad de las venas pélvicas
Dependiendo de qué venas sean la causa de los síntomas, las opciones de tratamiento incluyen:
- Uso de un balón para estirar las venas estrechas
- Inserción de stents para mantener abiertas las venas colapsadas
- Uso de espirales o tapones para sellar venas con fugas
Como ocurre con casi todos los procedimientos venosos, estas opciones toman una hora o menos y los pacientes abandonan el hospital apenas unas horas después del tratamiento.